De regreso al ruedo de este deporte tan bonito, estaba indeciso sobre quién poder elegir para mi próximo encuentro, ya que entre dolls con restricciones, aranceles subiendo y reseñas no tan buenas, me encontraba con la incertidumbre, sin embargo recordé haber leído acerca de una doll que cumple con todas las expectativas y antes de adelantarme a los detalles de la reseña, sólo queda decir que el mito fue verdad.
Para acordar con Magy primero se necesita realizar una transferencia de $150. Me dispuse a realizar con aproximadamente unos cinco días antes del encuentro para asegurar, ya que su política es de brindar solo un servicio por día, así que ya con el día predestinado sólo quedaba esperar y esperar a la fecha.
Llegó el día, lo de siempre, pasarnos datos de la hora, pactar el lugar y a realizar el ritual de rigor para estar presentable y limpio para el encuentro. En todo momento la comunicación fue rápida y efectiva, además de que le pedí dos atuendos de lencería para poder disfrutar y fue muy amable y accesible con ello.
Ya a la hora de la cita con los nervios de ya por fin conocer a la doll y con las ganas de ya explotar, suena el teléfono en la habitación para preguntar si espero a alguien. Poco después llegó ella, con una actitud súper relajada, como si la sintiera de una amiga que hace tiempo no veía, y eso es lo que te hace sentir cierta confianza.
Beso de piquito y comienza una charla amena. Después, me pregunta sobre cuál atuendo prefiero primero (en este caso elegí uno de Blanca Nieves que ufff) para dar paso a ir a vestirse. Sale y le pido un par de fotos a lo cuál accedió muy amablemente. La verdad es que con Magaly sentí esa química desde el comienzo, con una confianza que te da seguridad y sobre todo de poder disfrutar aún más el encuentro.
Pasamos a la cama y comienza a darme estimulación oral de una manera muy rica, con mucha saliva y con la posibilidad de yo tomar el control de la situación. La verdad es que de las mejores chupadas que me han dado en lo que llevo practicando este deporte. Así continuamos como por unos 10 minutos o más, tanto arriba de la cama, como ella hincada y yo parado. Un espectáculo tomar el control, además que también la estimulación a los gemelos fue muy placentera.
Ya muy caliente yo, le pido se monte encima de mí en posición de vaquerita para comenzar a darle suave, tomando sus caderas, besando su cuello, sus pechos y sus labios de una manera que lo harías con tu novia, ya que ella da pie a esa situación y en todo momento conecta contigo. Luego, empiezo a darle más duro y suelta sus gemidos y frases de que "así se siente muy rico", que quiere más duro y nos seguimos besando. Ya pasado un rato en esa posición pareciera que daríamos paso a la siguiente, pero ambos nos negámos y seguimos con esa cadencia de entra y sale, de suave a duro, y sobre todo, de tenernos el uno al otro para seguir disfrutando.
En el siguiente acto le pedí de perrito y mismo ritmo, de suave a duro, intervalos y acomodandola a mi manera. Algo que me encantó es que mientras le daba de perrito, ella con sus manos por debajo alcanzó a mis gemelos y comenzó a masajearlos, algo verdaderamente increíble y muy satisfactorio. Seguimos así por unos minutos más, para luego dar paso al misionero con mayor intensidad y aprovechando que siguiera el faje, con besos en la boca, por el cuello, hombros y pechos, para al final descansar un rato.
Ya durante el descanso, la plática fue muy amena y algo extensa, pero con las 2 horas elegidas de mi parte, no había prisa, (punto a favor tener más tiempo) la química entre los dos se siguió dando ahora ya con más amplitud al contarnos sobre nuestros gustos, fantasías y demás. La verdad que esto hizo que el encuentro fluyera de una mejor manera para dar paso a que con mayor confianza hubiera más intensidad para el segundo round.
Se levanta y me dice que si ahora quiero ver el otro modelo de lencería: negro, enfundada en unas medias y que le dejan ver sus nalgas más realzadas. Damos pie a que vuelva a estimular a mi amigo con un fervor mayor y hasta realizando la siguiente pregunta: "¿Me quieres cachetear con tu vrg?", pfff, haberlo dicho antes. Me prendió demasiado y comencé a abalanzarle a mi amigo sobre su boca de una manera más intensa, dándole lo que pedía, esas cachetadas y colocando a mi amigo en todo rincón de su garganta y cachetes, algo realmente satisfactorio y que en este deporte no había tenido la oportunidad de conectar de esa manera con una doll.
Siguió la estimulación sobre la cama, yo parado y ella hincada, hasta que la quería de vuelta montada encima de mí de nuevo de vaquerita. Ya a punto de enfundarme el condón, se le queda viendo a mi amigo y con su mirada me pide chuparme más; ni cómo negarle a mi amigo, a lo que seguimos un ratito más así, mucha saliva y atención a los gemelos. Delicioso.
Me la vuelvo a montar de vaquerita y el mismo proceso, sólo que ahora más prendidos, ella comienza a besarme el cuello y a gemir que le gusta. Damos paso ahora de vaquerita invertida un rato para acomodarla de perrito donde continúa pidiéndome más y más, que le diera más fuerte. Luego vino de misionero donde la tomé por el cuello y parte de sus cintura para moldearla a mi antojo y así continuar para darnos un descanso y seguir con la estimulación oral hasta que me hizo venir.
Todavía después del encuentro nos quedamos charlando más tiempo, de hecho pasaron más de las 2 horas y no hubo ningún inconveniente con ella. Le transferí lo correspondiente, se aseo un poco, pidió su taxi y nos despedimos. Una despedida que realmente me dejó con una sensación de añoranza por volverla a tener y sobre todo porque el trato con ella lo sentí humano, nada mecánico como regularmente a veces pasa en este ambiente.
Una experiencia totalmente magnífica, sin precedentes en mis anteriores encuentros y que me deja con la grata sensación de que Magy disfruta demasiado lo que hace. Ella no te apresura, toma el control de la situación y deja que lo tomes en algunos momentos, eso habla del compromiso de querer que te la pases bien con ella, que esas horas pactadas sean realmente para eso, para disfrutar y dejarte llevar de las fantasías y ganas que traes dentro y que deseas sacar al estar con una doll.
Creo que decir que si repetiría, está de más, mejor dicho, ahora tengo dudas de si conviene contratar a alguien diferente después de lo acontecido con Magaly, ya que si la quieres pasar más que bien, con la seguridad y confianza de que puedes ser tú en un encuentro con una doll, sin duda, hasta ahora para mí, ella es la opción.
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